Parte del establishment se entusiasma con un Massa presidente redentor del capitalismo. Pero ni su gestión como ministro ni su coalición política permiten esperar un giro pro-mercado.
El nuevo libro de Matías Kulfas es un refrito del clásico revisionismo peronista, con el objetivo de desmarcar a su autor del desastre que deja el gobierno del Frente de Todos.
A pesar de las piruetas argumentales del Gobierno, la economía informal no está creciendo, no es un fenómeno deseable y hay que generar los incentivos correctos para blanquearla.
Además de definiciones de política económica que ya no puede postergar, el Gobierno necesita con urgencia un candidato presidencial capaz de alinearse y sostenerlas.
Para esquivar el cepo, cada vez más programadores y emprendedores argentinos pasan a la clandestinidad fiscal, cobrando afuera, viviendo en cash. Los paliativos de Massa son todos chamuyo.
La producción de litio es una gran oportunidad para cambiar la economía del noroeste y enderezar la macro del país. Pero todavía estamos a tiempo de arruinarla.
El próximo gobierno debería eliminar las ‘licencias no automáticas’ para importar, porque perjudican a productores y consumidores y generan corrupción. Idealmente todas, idealmente el primer día.
Casi todos reconocen ahora que el Estado debe equilibrar sus cuentas. Por fin. Ahora discutamos cómo bajar y mejorar el gasto, indispensable para solucionar nuestro déficit estructural.
Después de medio año planchado, el precio de la carne está subiendo otra vez. El Gobierno responde con lo de siempre, que no funcionará, pero el problema es estructural y más profundo.