El especialista en lucha contra el crimen organizado dice que con “mano dura” no alcanza. Hay que implementar políticas para que los “soldaditos” pueda insertarse en la economía formal.
Todo lo que a los intelectuales kirchneristas les llevó años construir a fuerza de neologismos, lo agarra Milei, lo traga, lo mastica y lo devuelve devaluado.