LEO ACHILLI
La economía en 3 minutos

#31 | El padre de la kriatura

Aunque era esperado, el dato del 57,9% de pobreza sigue siendo grave. En el revoleo de culpas, la desestabilización de Alberto, Massa y Cristina está en primer lugar.

La semana estuvo teñida por la difusión del índice de pobreza, que trepó al 52,9%. Todos esperábamos una cifra en ese rango. Pero el hecho de que no sea sorpresivo no lo hace menos grave. Hay muchos otros datos que confirman lo terrible de la situación social.

Dos tercios de los niños de menos de 14 años son pobres en la Argentina. Los indigentes, aquellos cuyos ingresos no alcanzan para comprar la canasta alimentaria, son el 34% de los pobres o el 18% de toda la población. El hogar indigente promedio debería haber obtenido un 33% más de ingresos para ser solamente pobre.

La pobreza subió en los 31 aglomerados urbanos en donde se mide. Entre las grandes ciudades, el Conurbano fue en donde más aumentó y la Ciudad de Buenos Aires en donde el aumento fue más moderado. Esto se midió en el primer semestre, es decir que en promedio la data fue recolectada en marzo y abril.

[Presenta este newsletter Cushman & Wakefield, especialistas en inversiones inmobiliarias corporativas. Auspicia Galileo Fondos. Invertí con confianza. Invertí con inteligencia.]

Luego de conocidos los índices, empezó el juego de la culpa. El kernerismo no dudó un segundo en echarle la culpa a Milei. Las huestes del Peluca dijeron que esto es todo herencia K. Lo cierto es que, si uno tuviera que hacer un juicio intelectual, el kernerismo es a todas luces el padre de la criatura. Aunque haya sido Milei quien apretó el gatillo del plan de estabilización que llevó a la recesión y a una inflación más alta en los primeros meses de este año, esto se debió a la desestabilización de Alberto, Massa y Cristina. De hecho, Milei trató de proteger algunos gastos sociales como la Asignación Universal por Hijo de su motosierra y su licuadora. Evidentemente no alcanzó, porque si la indigencia pasó de ser el 28% de todos los pobres al 34%, es que hacía falta más.

Dado que la Argentina tiene que empezar a crecer para reducir la pobreza, se puede decir que el ajuste fiscal y la recesión de los últimos meses son condiciones necesarias para empezar un proceso virtuoso, aunque no suficientes para que cambie la mano.

Como buena noticia podemos señalar que cuando se analizan los datos del primer y del segundo trimestre se nota una mejora. Los expertos dicen que la pobreza pudo haber bajado del 55% en los primeros tres meses al 50% sobre el período abril-junio. Si, como creemos, la economía tocó fondo en el segundo trimestre del año y la inflación sigue en los niveles actuales, es altamente probable que cuando salgan los próximos datos en marzo del 2025, la pobreza muestre mejores números, aunque no se pueden esperar milagros. Este es un proceso lento. Conseguir cierta armonía social es tan importante como estabilizar la macro. Si pensamos en términos de atraer inversiones, es claro que se necesita paz social, mejor educación, mejor salud y una sensación de que estar dentro del sistema puede inducir al progreso para evitar que se busquen soluciones “por la banquina”.

Mientras tanto, el blanqueo, ahora prorrogado, sigue generando sonrisas en el Gobierno. Los depósitos en dólares ya crecieron unos 10.000 millones, de manera que si bien 20.000 millones blanqueados luce una estimación optimista, el número final puede no estar tan lejos. Esto no impacta en reservas, pero la apuesta es que algo se derrame sobre el financiamiento de la actividad productiva y una base imponible más alta. Por otro lado, se verifica un aumento de préstamos en dólares, lo que mejora la liquidación de dólares en el mercado y le permite al Banco Central no tener que vender verdes en septiembre.

La actividad de julio trajo muy buenos datos, como pensábamos, pero agosto parece que viene medio pelo, como se dice en la academia. Algunos sectores bien, otros más pobretones. De septiembre no hay datos duros, pero no parece que sea un boom.

Los salarios de julio le ganaron a la inflación, lo que es una buena noticia, y la inflación de septiembre va a ser menor al 4% con el ayudín de haber bajado 10 puntos el impuesto PAIS. Si baja a 3,5% o menos, se podrá festejar.

Para esta semana, estaremos atentos a la recaudación impositiva de septiembre. Salen los primeros datos de la actividad del mes, que como siempre son los que tienen que ver con autos, motos y cemento. También tendremos datos de la distribución del ingreso. Esperamos ver las repercusiones políticas del acto en el Parque Lezama.

Hasta la semana que viene.

Si te gustó esta nota, hacete socio de Seúl.
Si querés hacer un comentario, mandanos un mail.

Si querés suscribirte a este newsletter, hacé click acá (llega a tu casilla todos los lunes).

Compartir:
Andrés Borenstein

Economista jefe de Econviews. Profesor de economía (UBA y UTDT). Conductor del podcast 'La economía en 3 minutos'.

Seguir leyendo

Ver todas →︎

#33 | Cuando todos la ven

El famoso AL30 vale más de 60 mangos, el riesgo país araña los 1.100 puntos y la brecha sigue bajando. El FMI bajó los sobrecargos y la tasa de la deuda. Pero a no cantar victoria. Argentina es volátil.

Por

#32 | Baja el dólar, ¿se acerca la liberación?

Es la pregunta del millón. Aunque las reservas sean negativas, hay liquidez para intervenir si fuera necesario

Por

#30 | El mercado es creyente y la ve

El Gobierno entregó el presupuesto 2025 con una declaración de principios: si sobra plata, se pagan deudas o se bajan impuestos; si falta, se bajan gastos. Así acumuló credibilidad.

Por