De Buenos Aires como metrópoli donde el tiempo se detuvo, las postales del Quijote en el siglo XX y la hipérbole porteña que convierte cualquier detalle en algo extraordinario.
Cada regreso a Buenos Aires es para el que emigró un intento de compaginar recuerdos y nuevas realidades. Este ejercicio, en el que la identidad está en juego, se ha transformado por la tecnología.